El Dr. Walter Farinase, en una reciente entrevista con Medios RED, brindó información clave sobre la situación del dengue en nuestra región. Según explicó, se espera un brote para febrero y principios de marzo, debido a las condiciones climáticas actuales. Afortunadamente, los casos han disminuido, pero es fundamental mantener las medidas preventivas.
El dengue cuenta con cuatro cepas, de las cuales en nuestra zona se han identificado los tipos 1 y 2, mientras que las otras dos no han sido aisladas. Actualmente, la vacuna contra el dengue se está aplicando y en marzo se administrará la segunda dosis. Para una adecuada inmunización, es necesario que pasen tres meses desde la aplicación de la segunda dosis. La vacunación puede ser a personas mayores de 4 años, sin límite de edad, priorizando al personal de salud y a quienes ya han tenido la enfermedad.
Síntomas y etapas del dengue
El dengue atraviesa varias etapas. La primera es la fase febril, caracterizada por fiebre alta, cefalea intensa, dolores musculares y articulares, síntomas por los cuales se le conoce como la «fiebre quebranta huesos». Es importante destacar que el dengue no presenta síntomas respiratorios. Si la fiebre persiste durante 3 a 5 días sin una causa aparente, y considerando que nuestra región es zona endémica, se recomienda consultar a un médico para realizar los análisis correspondientes.
La segunda etapa, que se desarrolla al quinto o sexto día, es la más crítica. En este período, los síntomas pueden incluir sangrado de encías, diarrea con sangre, hematomas, dolor abdominal intenso y dificultad respiratoria. Ante cualquiera de estos signos, es fundamental buscar atención médica urgente, ya que algunos pacientes pueden requerir internación. Finalmente, en la etapa de recuperación, el paciente empieza a mejorar clínicamente y los análisis muestran valores normales. Aunque la incidencia de casos graves es baja (1 en 1000), si no se trata correctamente, el dengue puede ser fatal.
Prevención: una tarea de todos
El Dr. Farinase enfatizó que la clave para combatir el dengue es la prevención y la responsabilidad de toda la comunidad. El mosquito transmisor es domiciliario y necesita agua estancada para reproducirse. Por ello, es fundamental evitar la acumulación de agua en cualquier recipiente, cambiar frecuentemente el agua de los animales, realizar descacharre en los hogares y prestar especial atención a piletas que puedan convertirse en criaderos de mosquitos.
Desde el Centro Médico 21 de Diciembre, reforzamos la importancia de estas medidas y alentamos a la comunidad a tomar conciencia para reducir la proliferación del mosquito y, con ello, el riesgo de contagio. ¡La prevención es la mejor herramienta contra el dengue!
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